Hace unos meses salió a la venta el libro “¡Gracias!” de nuestro presidente Andrés Manuel López Obrador y luego de leerlo me atrevo a adelantar que este texto será un referente indispensable sobre este periodo de la Historia reciente de México y un documento fundamental para estudiar y comprender el pensamiento y legado político del iniciador de nuestra Cuarta Transformación. Para nuestro presente, el libro es un antídoto eficaz en contra de la desinformación de la derecha mexicana.
Adelanto que mis dados están cargados en esta ocasión, porque he seguido y apoyo a López Obrador desde la lucha contra el desafuero, la elección del 2006 y las enormes movilizaciones en la lucha en contra de la imposición fraudulenta del espurio Felipe Calderón. En ese acompañamiento he leído casi toda su obra, desde “La mafia nos robó la Presidencia” hasta este reciente, solo un par de libros suyos y la tesis de licenciatura que la tengo pendiente de lectura es lo que me falta por conocer de su obra.
Con base en estas lecturas estoy en condiciones de asegurar que la palabra “congruencia” es la que mejor define a López Obrador, porque su discurso político no ha cambiado mucho, tal vez solo hubo una evolución conceptual de “República Amorosa” delineado en su libro “No decir adiós a la esperanza”, luego con “República Fraterna” explicado en su obra “2018 La salida. Decadencia y renacimiento de México”, posteriormente con “República amorosa y fraterna” en “Hacia una economía moral” hasta su explicación más completa en el libro “¡Gracias!” y que es parte fundamental de su pensamiento político que ha aplicado en este Gobierno y que ha definido como “Humanismo Mexicano”.
Sin embargo, la manera más resumida y concreta para comprender el pensamiento político de López Obrador es cómo se autodefinió en la entrevista que le realizó Carmen Aristegui en 2013 y que integró en su libro realizado con Ricardo Trabulsi “Transición, Conversaciones y retratos de lo que se hizo y se dejó de hacer por la democracia en México” en el que ella le pregunta “¿cómo te defines? A lo que responde nuestro ahora Presidente que “soy un humanista de izquierda. Puede ser un pleonasmo, porque el humanista que no es de izquierda no es humanista”.
De esta manera, al reconocer su autodefinición política, podemos comprender mejor su nuevo libro. Se trata de una obra autobiográfica que es acompañada por un bien logrado trabajo de contexto social, político, económico e histórico, reflexiones sobre la vida pública, con un rápido recorrido a través de los avances alcanzados en este histórico Gobierno que da el inicio a la Cuarta Transformación y por supuesto una explicación sobre su pensamiento político.
Todo esto logrado en una obra de estructura sencilla con capítulos temáticos que nos lleva por su vida personal y de México casi de manera cronológica con un lenguaje sencillo y directo, una redacción que nos permite confirmar al leer sus obras anteriores que se trata de la misma pluma, pero madurada a fuerza de trabajo y de oficio en su género.
Esta estructura cronológica no impide que entre en ocasiones en un profundo análisis de la Historia de México del que vale la pena reflexionar.
En las primeras páginas hasta antes de recibir el cargo de jefe de Gobierno en la Ciudad de México, el autor aborda su vida y profundiza al compartir algunos consejos para los jóvenes para el desarrollo de su actividad política, sugiere autores y recuerda aprendizajes fundamentales de ese proceso.
“De entrada, sostengo que la no violencia es eficaz en el ejercicio de la política, aunque para avanzar con esta táctica se necesita organización y liderazgo”, expone al abordar cómo aplicó en su lucha la resistencia civil pacífica.
Aunque en sus libros anteriores nos narra su trayectoria, su lucha política contra los poderes fácticos, cómo compitió como candidato pesar de la guerra sucia de los conservadores, los complots que le orquestaron y de los fraudes electorales en su contra de 2006 y 2012, cómo creó el Movimiento de Regeneración Nacional (MORENA) y el triunfo de 2018, en este libro lo retoma con nuevos elementos y con una visión más amplia que permite el paso del tiempo, algo que lo vuelve muy interesante.
Posteriormente nos expone los retos de su Gobierno como Presidente de la República y cómo fueron resueltos, aporta datos, cifras y anécdotas que describen e ilustran lo que se vivió en este sexenio. Las pequeñas grandes batallas, los intentos de golpe blando de la derecha y lo logrado de esta etapa histórica en la que pueblo y Gobierno caminaron por una mayor justicia distributiva, democracia y bienestar para la población.
En su texto agradece el apoyo popular y en su mensaje final expresa que “se pudo demostrar que es posible fortalecer económicamente al país sin corrupción, derroche, deuda, altos impuestos, devaluaciones y, al mismo tiempo, distribuir el ingreso nacional con justicia para no marginar a nadie, sacar de la pobreza a muchos y reducir la desigualdad social”. Es un libro del que recomiendo su lectura.
Por Fabián Muñoz