La aventura de escribir un diario de viaje comienza desde la planeación. Se aconseja comprar, para este propósito, un cuaderno que se pueda extender por en medio (no engargolado) para usar ambas páginas cuando sea necesario. Se ocupará también un pegamento y una pluma. Antes de viajar es deseable realizar listas que ayudan a registrar cosas para investigar sobre los lugares que vamos a visitar, cosas que no quiero olvidar, y luego plantearnos como ejercicio la pregunta ¿Qué es lo que realmente quiero hacer? , ¿Por qué quiero viajar? , tal vez la respuesta no sea tan obvia como se podría suponer en un primer momento, y podría ser tan trascendental como quien se plantea la idea de viajar para conocerse a sí mismo. Es importante señalar en un mapa los lugares que vas a conocer, y muy recomendable investigar algunos datos de ese lugar, imprimir un itinerario ¡ah! y prever en tu diario una página para anotaciones rápidas y otras para que los viajeros con los que interactúes escriban sus datos de contacto y algún comentario que quieran hacer. Saber por qué quiero hacer este viaje, por qué quiero llenar este cuaderno, qué expectativas tengo, qué pasa si algo me decepciona, cuáles son mis miedos, todo es importante porque permite que te conectes con esas emociones. Tu diario se puede parecer a la bitácora tradicional, donde hay que empezar cada página anotando la fecha, el lugar, el clima, los kilómetros recorridos, pero además puedes colocar algunos pequeños elementos decorativos que fuiste recogiendo a lo largo del día como boletos, timbres o postales. Al llegar a la noche, procúrate un momento para pensar ¿Qué me pasó hoy?, ¿Qué quiero recordar?, ¿Tuve alguna conversación importante? ¿Me impresionó algún monumento o paisaje? Recuerda que dice el sabio: “La prisa mata”. Como ejercicios para detenerte y aprovechar mejor tus experiencias se aconseja dividir la página en cuatro rectángulos y anotar en el primero algún fragmento de conversación escuchada o sostenida, en otro rectángulo, mencionar algún paisaje o fragmento de paisaje que te ha impresionado, en el tercer cuadrado anotar alguna situación que quiero recordar y en el último, alguna sensación o importante. Otra forma puede ser dividir la página en seis rectángulos y en cada uno anotar lo que vi, lo que escuché, lo que olí, lo que probé, las texturas que toqué y la sensación más sobresaliente de ese día. Fundamentalmente, debemos recordar que un viaje está constituido por el movimiento y que los tiempos de recorridos en autobús, en tren, en avión no son tiempos muertos, también allí ocurren cosas. Es importante prestar atención a los detalles de la naturaleza y si tomamos una foto, se puede agregar una pequeña reflexión, acerca de qué pasa en ese medio de transporte, en nuestro diario marcar el inicio y el fin de ese trayecto y también los puntos intermedios más importantes. Se puede recordar que un viaje es un poco como la vida y no todo sale bien. Hay que estar preparados para las sorpresas. podemos hacer una página dividida de manera vertical en dos lados lado A y lado B. En el lado A anotamos lo que salió como lo esperábamos, los momentos felices, las celebraciones, y en el lado B anotamos lo que no pasó de ser cotidiano, los momentos inesperados, pero negativos, los momentos de mal humor y nuestras quejas. En resumen, la primera parte será para anotar las celebraciones y la segunda, para las quejas. Podemos decorar con elementos alusivos y terminar nuestro diario de viaje con un Collage, para lo cual podemos hacer un mapa de algún lugar especial, de los lugares en los que pasaron cosas importantes, las referencias, las frases sobresalientes. Sería un mapa subjetivo de nuestro viaje, porque no olvidemos que el viaje es un momento especial de disfrute y desconexión. Por último, recordemos llevar el cuaderno de viaje siempre con nosotros, por lo tanto, éste debe ser un cuaderno no muy grande ni muy pesado, y si -en ese momento- no tenemos tiempo de escribir podemos grabarnos una nota de voz y algo que nos facilita el trabajo es llevar las páginas pre tituladas
Me pareció importante compartir con ustedes estos tips y recomendaciones de escritura del diario de viaje, ahora que el verano nos invita a salir y conocer otros lugares. En lo personal, viajaré con mi esposo, y la familia de una de mis hijas. Los invitaré a llevar su diario de viaje, no como una tarea sino como un hábito que haga más delicioso y relevante lo vivido y disfrutado. Porque si viajar siempre ha sido una aventura, también lo es la recreación que hacemos de ella. Con esto traemos a la memoria momentos imborrables, que, puestos por escrito, quedarán como parte del legado familiar y social.