La Pasión de Cristo se vive en carne propia en el municipio de El Marqués, a sólo 20 minutos de la capital queretana, donde el viacrucis viviente de La Cañada es una de las tradiciones más arraigadas en la comunidad desde hace 60 años. En estas fechas, miles de personas se dan cita en la comunidad para presenciar estos importantes pasajes bíblicos.
Como cada año, esta tradición religiosa se lleva a cabo gracias al trabajo de decenas de familias que se involucran en la organización y escenificación de La Pasión. La representación es coordinada por Los Tribunales de Jesús, colectivo que se encarga de elegir locaciones, planear los escenarios, elegir a los actores y adecuar los diálogos.
También te podría interesar: En La Purísima, San Luis Potosí está la joya de la aventura ¡Descúbrela!
Se involucran más de 70 actores en escena, entre ellos personas de todas las edades que, pese a no tener experiencia en actuación, viven intensamente cada pasaje, al que le dedican largas jornadas de ensayos y preparaciones.
La Virgen que llora de verdad en La Cañada de El Marqués
Cuando asistes, te das cuenta de la intensidad, así como el vestuario realista y los cerros que rodean a La Cañada ofrecen a los visitantes un verdadero viaje en el tiempo.
Esta vívida actuación ha ofrecido a los propios queretanos y a los turistas extranjeros, escenas inolvidables que han quedado grabadas en la memoria colectiva, y también en las fotografías y notas periodísticas.
Una de ellas, quizá la más importante en estas seis décadas de representación, fue la de Claudia Martínez, quien pasó a la historia como "La Virgen que llora de verdad".
Tenía apenas 15 años cuando encarnó a este personaje por primera vez, y aunque muchos dudaban de su capacidad actoral, sorprendió a todos con su empatía y sensibilidad.
No confiaban en mí porque era muy chica y no tenía hijos, decían que no iba a entender ese sentimiento. Pero ese día la emoción de toda la gente es tan fuerte, las actuaciones tan reales que te trasladas a esos años y vives todo muy intensamente. Yo veía a toda la gente, bajo el sol, caminando por el cerro y a lo lejos veía cómo se balanceaba la cruz que llevaba cargando el actor de Jesús, que no pude contener las lágrimas, lloré y lloré son emociones muy fuertes.
Ahí conocerás que el personaje que más esfuerzo físico requiere es Jesús, representado por Omar Ramírez. Pues las cruces de madera utilizadas en esta representación, llegan a pesar hasta 80 kilos, por lo que todos los días Omar se prepara físicamente.
Vive intensamente el viacrucis en La Cañada de El Marqués
Para que te prepares y no te sorprendas, este viacrucis se vive intensamente, de tal manera que serás testigo de que los golpes, las bofetadas y los latigazos son reales.
“Son escenas muy fuertes, aunque sabes que todo está preparado, los golpes y demás sí se sienten”, señala Omar, quien se dice orgulloso de participar en esta tradición.
Lugares que enamoran en La Cañada de El Marqués
Además de este tradicional viacrucis, El Marqués ofrece múltiples opciones para complacer a los turistas más exigentes, pues además de sus museos y casa de cultura, cuenta con paisajes naturales, zonas de pesca y recorridos por ex haciendas que datan de los siglos XVII, XVIII y XIX.
Qué más ofrece El Marqués
No te puedes quedar sin recorrer sus museos y casa de cultura, además de que podrás apreciar los paisajes naturales, la zona de pesca y los recorridos por las ex haciendas. La Presa del Diablo y el Autódromo de Querétaro también son visitas obligadas.