Las innovaciones en la tecnología de la Fórmula 1, representan una posible vertiente en la fabricación de la industria automotriz, pues muchos de los avances que han presentado las escuderías en años anteriores, se pueden apreciar ahora en los autos modernos destinados a la población común.

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A mediados de febrero, comenzó la temporada del torneo más importante de carreras a nivel mundial, la Fórmula 1; pero algo que llamó la atención de muchas personas en el medio, fue la extraña acción que realizaba Lewis Hamilton, piloto de la escudería de Mercedes-Benz, con el volante de su bólido.

En las pruebas previas al campeonato en el circuito de Montmeló en España, el seis veces ganador del mundo, se encontraba mostrando la nueva ingeniería aplicada en las llantas de su auto. El DAS, una innovación tecnológica que permite al piloto controlar la inclinación de las ruedas para tener un mejor control en la pista y evitar el calentamiento.

¿Cómo funciona el DAS?

Al tirar o empujar del volante, el piloto puede controlar la posición de inclinación que necesita para que los neumáticos respondan de manera óptima a la pista.

Una inclinación "abierta" o en un ángulo obtuso, ayuda al conductor a moderar la estabilidad del auto. La apertura de las llantas le proporcionan un mejor agarre a la pista al bólido.

Una inclinación "cerrada" o en ángulos rectos y agudos calientan en menor grado los neumáticos y proporcionan una mejor aerodinámica al auto que se refleja en su aceleración.

Aunque esta novedad, pudiera parecer mínima, representa un adelanto en la ingeniería automotriz que pudiera significar no solo el título del campeonato sino una posible aplicación de los autos convencionales.