Después de una intensa semana de entrenamientos y acondicionamiento en las pintorescas playas de Mazatlán, Sinaloa, el equipo de los Rayos del Necaxa ha regresado a Aguascalientes, listo para encarar una serie de compromisos cruciales en los próximos días. Estos trabajos intensivos no solo han buscado mejorar la forma física de los jugadores, sino también afinar los detalles tácticos que el profesor Eduardo Fentanes pretende implementar.
Con la vista puesta en el horizonte, el conjunto rojiblanco se encuentra a menos de una semana de disputar su primer partido de preparación frente al equipo de Irapuato, programado para el próximo sábado. Estos encuentros amistosos se presentan como oportunidades cruciales para el cuerpo técnico, permitiéndoles evaluar el desempeño de los jugadores en situaciones de juego real y afinar estrategias. Los trabajos físicos en la playa han sido solo el inicio, ya que el cuerpo técnico espera conocer a fondo las cualidades de cada jugador en todas las líneas del equipo.
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Conscientes de posibles bajas de elementos clave y la inminente incorporación de refuerzos, la planificación estratégica se vuelve esencial para mantener el equilibrio y la competitividad durante la temporada.
Según la información oficial, Necaxa tiene programados un total de cuatro juegos de preparación antes de que concluya el año. Además del enfrentamiento contra el equipo de Irapuato, se medirán con el Tapatío, Atlas y Querétaro. Estos encuentros ofrecerán una valiosa oportunidad para ajustar tácticas y estrategias, adaptándose a las circunstancias cambiantes del equipo.
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