Si bien no hay anteojos para perros y gatos, la cantidad de enfermedades que afectan la vista de estas mascotas son incontables y tienen su origen en la defensa inmunológica de sus ojos lo que les provoca varias alteraciones visuales.

El problema es que en muchas ocasiones los propietarios de estos animales no se dan cuenta de los padecimientos y son llevados a recibir atención médica cuando las enfermedades ya están muy avanzadas, aunque las evidencias son muchas: chocan con los muebles, lagrimean mucho o muy poco y les va surgiendo una nubosidad azulada en los ojos.

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A pesar de esos signos, ocho de cada 10 mascotas que llegan a las veterinarias, tienen algún problema con su vista y sus dueños lo ignoran, aparentemente esto ocurre más en perros, porque son los que más son llevados a consulta, los gatos, como tienden a estar mucho en la calle los llevan con el especialista luego de alguna pelea, pero son pocos los que reciben atención médica, aunque viven riesgo constante de caer si tienen problemas oculares.

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