Activistas ambientales ya han solicitado una visita de inspección al relleno sanitario “San Nicolás” en Aguascalientes directamente a la Procuraduría Estatal de Protección al Ambiente, para verificar que etapas siguen abiertas y cuales ya deberían de cerrarse:

Tienen que ir abriendo etapas y cerrando, no se habla de una clausura sino de que se llena hasta el tope y hasta ahí tienen que cerrar.

Dijo la activista que hace algunos meses atrás se encontró que estaban reabriendo varias etapas, y que en su momento el propio procurador Héctor Anaya argumentó que estaba permitido abrir etapas como la tres y la cuatro.

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Además los ecologistas argumentan que ya se revisó la etapa sexta “A” y no se vio que se pudieran abrir etapas anteriores:

El relleno sanitario está recibiendo ya más residuos de los que en su momento estaban considerados y el problema es que estos residuos generan lixiviados y que la capacidad que en un momento era una, ya se considera que puede estar rebasada.

Rebeca Castillo, Consultora jurídica ambiental

Mencionó Rebeca Castillo que los lixiviados son gases que se van desprendiendo y son contaminantes a la atmósfera y que si en algún momento se rebasó la capacidad esto se puede ir al subsuelo.

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Los problemas que actualmente hay en el relleno sanitario son los olores que se desprenden y afectan directamente a los vecinos, además de la contaminación al ambiente. Lo peor que puede suceder en el relleno sanitario “San Nicolás” es que pueda colapsar, lo que ocasionaría una clausura, así lo dio a conocer la activista.

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