La pandemia y el obligado encierro de familias enteras en sus hogares por largo tiempo sí han incrementado de manera significativa problemas emocionales tales como la depresión, violencia intrafamiliar, ansiedad, comportamiento de riesgo suicida, consumo de sustancias adicticas, trastornos del sueño y alimenticios.
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El director del área de Salud Mental del ISSEA, Francisco Javier Pedroza Cabrera, alerta la necesidad de dar alerta a las líneas de atención en caso de detectar un incremento anormal en la irritabilidad, conflictos interpersonales, insomnio, hiperactividad, dolores de cabeza, disminución del apetito, cansancio, miedo, ansiedad, desamparo, desesperanza, culpa, problemas de memoria, falta de concentración, pensamientos repetitivos y negación de las emociones, pues son un indicador que algo anda mal y debe pedirse ayuda de inmediato.
En conferencia de prensa virtual, el funcionario médico explicó que al término del primer semestre del año se registraron en Aguascalientes un total de 89 muertes por suicido. Con corte a este jueves, la cifra se ha incrementado a 93.
Dadas las condiciones mentales que implica una condición de aislamiento social prolongada, como la que actualmente se vive, se realiza un estudio de cada uno de los casos a efecto de determinar qué tan relacionado se encuentra cada suicidio, de manera directa o indirecta, con las condiciones de encierro obligado.
“Respecto al año 2019, a estas fechas se nos ha incrementado tres muertes por suicidio y respecto de 2018, el aumento es de seis muertes por suicidio, durante el primer semestre del año”, puntualiza.
Durante los primeros seis meses del año, explica el funcionario médico, se recibieron en la línea Vive 11 mil 334 llamadas, 35% de las cuales está directamente relacionada con comportamiento de riesgo suicida. Otras 400 llamadas tienen que ver de manera directa con el miedo a la pandemia o temor al contagio de Covid-19.
Pedroza Cabrera reconoció que la situación que vivimos a nivel mundial nos obligará a, de ahora en adelante, pensar y actuar como si nos fuéramos a contagiar, usar cubrebocas, lavarse continuamente las manos, asear nuestro espacio de trabajo y pensar siempre como si fuéramos portadores del virus y pudiéramos contagiar a los otros, sin desdeñar que cualquier persona puede ser portadora, aunque no muestre síntomas y no salir de casa más que cuando sea estrictamente necesario.
400
Personas han llamado a la línea Vive por tener ansiedad ante la pandemia o miedo al contagio
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