China prohibió la importación de más de cien productos alimenticios y agrícolas de Taiwán en medio de la polémica por la posible llegada esta noche a la isla de la presidenta de la Cámara de Representantes de Estados Unidos, Nancy Pelosi, aún sin confirmación oficial.
La Administración de Aduanas del país asiático publicó en las últimas horas en su página web un listado de empresas taiwanesas cuyos productos quedan vetados de inmediato y alegó, sin más detalles, que estas compañías violaban regulaciones importantes.
Esta sería la primera reacción directa de China ante la posibilidad, avanzada por medios de Estados Unidos y Taiwán, de que Pelosi aterrice esta noche en Taipéi en una visita no anunciada dentro de la gira que lleva a cabo por Asia y a la que Pekín ya advirtió de que, de producirse, responderá con contundencia.
Entre las empresas afectadas figuran Vig Bakery, Jingdian Food, Guo Yuanyi Food, Weili Food, Weiquan Food y Taishan Enterprises.
Según el medio taiwanés UDN, la medida "causará un grave daño a la industria alimentaria, agrícola y de pesca" del territorio, que ya había recibido un golpe comercial por parte de Pekín el año pasado con la prohibición a la exportación de piñas y otros cultivos por un supuesto riesgo de plagas.
Analistas expertos en el conflicto taiwanés ya habían considerado que una de las respuestas de China a la eventual visita de la política estadounidense, tercera en la línea de sucesión a la Casa Blanca, sería la imposición de nuevas sanciones a Taiwán.
Pelosi ya anunció que visitaría ese territorio en abril pasado pero canceló el viaje poco antes después de dar positivo por coronavirus. Varias delegaciones de congresistas han pasado por Taipéi en los últimos meses.
China reclama la soberanía sobre la isla y considera a Taiwán una provincia rebelde desde que los nacionalistas del Kuomintang se replegaron allí en 1949, tras perder la guerra civil contra los comunistas.
Taiwán, con quien el país norteamericano no mantiene relaciones oficiales, es uno de los mayores motivos de conflicto entre China y EU, debido sobre todo a que Washington es el principal suministrador de armas de Taiwán y sería su mayor aliado militar en caso de conflicto bélico con el gigante asiático.
Las tensiones han aumentado en el estrecho de Taiwán en el último año, durante el cual creció el número de incursiones de aviones chinos en la autodefinida zona de identificación aérea (ADIZ) de Taiwán y porque la presidenta taiwanesa, Tsai Ing-wen, admitió que Estados Unidos cuenta con presencia militar en la isla, algo que Pekín calificó de "provocación".
El paso de destructores estadounidenses por el estrecho de Taiwán en los últimos meses también ha sido condenado repetidas veces por Pekín.