Shein "contiene las maravillosas 3B que todos amamos: bueno, bonito y barato”, asegura Yunuen, una de las quizá miles de mexicanas que revenden en redes sociales la ropa y accesorios disponibles en la plataforma china de comercio electrónico que ofrece moda de bajo costo y que ya es uno de los principales jugadores del mercado.
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Si bien Shein prohíbe la comercialización de sus productos o generar empleos derivados de la venta de los mismos, tal como indica en los términos y condiciones en su página web, en las rede sociales abundan los perfiles que comercializan las mercancías al mismo precio que la propia minorista fundada en 2008 y que ya cuenta con clientes en al menos 150 países.
¿Cuál es el truco?
Fernanda M, una joven del Estado de México, cuenta que su negocio consiste en mostrar el catálogo de Shein a sus clientas, quienes seleccionan el producto, talla. El precio, aclara , es el mismo que aparece en la página. La clave, agrega, es aprovechar ofertas, cupones, puntos o tarjetas de regalo para reducir los gastos de envío, lo que resulta en su ganancia.
“La ropa que ofrezco está de moda y es barata, esto atrae a los clientes que ya son conscientes del precio y en ocasiones de la buena calidad del producto”, platica Fernanda.
Desde su nacimiento, Shein ha tenido un rápido crecimiento en Estados Unidos y América Latina. Hoy está en espera de poder realizar una Oferta Pública Inicial (OPI) en Wall Street.
Al cierre de marzo, la firma asiática tenía una valoración de más de 60 mil millones de dólares y, de lograr entrar al mercado bursátil, se convertiría en la empresa china más valiosa después de Didi, según analistas consultados por Reuters.
Shein tiene planes de aumentar su presencia en América Latina, centrándose en el mercado mexicano. Para ello planea abrir una fábrica y está buscando expandir espacio de almacenamiento en un corredor industrial al norte de Ciudad de México, confirmó Reuters a finales del mes de junio.
La creciente presencia de Shein en México se produce mientras la compañía enfrenta oposición en Estados Unidos, donde algunos legisladores planean presentar un proyecto de ley para eliminar una exención arancelaria utilizada por las empresas de comercio electrónico que envían productos de bajo costo desde China directamente a los compradores.
Al margen de lo anterior crece la reventa en redes sociales. Karen R, una mujer que encontró en el negocio una manera de aumentar sus ingresos, explica que una de las razones por las que tiene éxito es porque muchas personas aún no confían en las compras en línea y ahí es donde entran ellas para buscar ganancias.
“En este negocio, la confianza es fundamental, las personas prefieren tratar con una persona directamente que comprar o proporcionar sus datos en una aplicación. Requiere mucha paciencia, pero es realmente rentable si le dedicas tiempo y te responsabilizas con tu negocio”, agrega Karen.
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Para Coral M, lo más difícil de vender ropa en línea es que la gente tenga confianza, “cuesta trabajo hacerse de clientes, ya que es un negocio que no genera ganancias en un mes, lleva tiempo, pero aprovechando las promociones, cupones y descuentos, se puede vivir de un negocio como este”.
De acuerdo con Bloomberg, a Xu Yangtian, fundador y director ejecutivo de Shein, le tomó menos de una década crear una de las mayores fortunas del mundo, calculada en unos 23 mil 500 millones de dólares. Las ventas de la compañías sumaron 16 mil millones de dólares en 2021.
