Ante la caída de clientes, carnicerías se han visto obligadas a adoptar otros esquemas de ventas, principalmente el servicio de entregas a domicilio, a fin de mantener sus finanzas a flote.

Raúl González Reyes, presidente de la Unión de Industriales de la Carne, informó que desde que se impusieron medidas de aislamiento social las ventas de cárnicos disminuyeron hasta un 50%, motivo por el cual han tenido que diversificar los esquemas para hacer negocio con sus clientes.

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Indicó que la contingencia sanitaria provocada por el Covid-19 ha mantenido a muchas personas resguardándose en sus casas, en acatamiento a las recomendaciones y por temor a contagiarse, quienes han preferido abastecerse de comida enlatada para cumplir con las medidas de aislamiento.

Para que incorporen productos cárnicos a sus dietas, algunos establecimientos optaron por el servicio a domicilio, los que no tenían esta modalidad la incorporaron y otros simplemente la reforzaron; aunque la respuesta no ha sido copiosa, les ha permitido desplazar productores de cerdo, pollo y res.

Subrayó que los carnicerías de barrios se han adoptado mejor a este esquema, pues para las que quedan en mercados es más difícil realizar los desplazamientos, aunque también ofrecen, pero con un mayor tiempo de entrega.

Para concluir, el presidente de la Unión de Industriales de la Carne reconoció que no todas las carnicerías se mantienen abiertas, pues las que continúan en operación lo hacen bajo ciertas restricciones, obligando el uso de cubrebocas y gel antibacterial, además de establecer ciertos límites entre la vitrina y el carnicero para salvaguardar la integridad de clientes y personal.

50%

Han caído las ventas de productos cárnicos.

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