Que las posadas tradicionales sean cada vez más escasas durante la época decembrina, depende en buena medida del elevado costo de los artículos e implementos que tradicionalmente se requieren para este tipo de celebraciones.
Organizar una celebración de este tipo, para apenas 30 personas, puede tener un costo de hasta mil 504 pesos. Así, la inversión a realizar por aquellos que ofrezcan las nueve posadas, del 16 al 24 de diciembre, sería de 13 mil 536 pesos.
De acuerdo al reporte “Posadas navideñas: dale, dale, dale y no pierdas el tino…del consumo responsable decembrino”, elaborado por la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco), una posada que se respete debe tener, además de un ponche caliente, velas, libros de oraciones y cánticos, piñata con fruta y dulces, así como bolos y colaciones.
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Si bien en la elaboración del ponche, la receta tiene ligeras variaciones, generalmente incluye cañas, guayabas, manzanas, tejocotes, pasas, ciruela pasa, tamarindo, jamaica, canela y piloncillo.
Un estudio de mercado realizado por la dependencia federal revela que, para la adquisición de guayaba, manzana, pasas, canela, caña, ciruela pasa, tamarindo y tejocote suficientes para la elaboración de esta bebida en cantidad suficiente, deberán desembolsarse 376 pesos.
Para pedir la posada se hacen dos grupos, uno afuera de la casa que representa a los peregrinos y portan velas, las cuales simbolizan el alumbramiento del camino, la luz que los guía, mientras el grupo que permanece en la casa interpreta a los hosteleros. El gasto para ello está calculado en 380 pesos, que incluyen el costo de las velitas, los libros con oraciones y cánticos para pedir posada y los peregrinos de barro que deben llevarse.
Por la piñata, generalmente de barro, con el contenido incluido, se deberán desembolsar otros 470 pesos; 220 pesos más para los bolos con colación y cacahuates, así como las bolsas con decorado navideño en que ésta se entrega.
El estudio, realizado con un cálculo base de 30 personas, advierte que el gasto posible está directamente relacionado con el número de invitados, el tipo de alimentos y bebidas que se ofrezcan, así como el lugar de compra.
Se recomienda evitar la adquisición de productos de los cuales se puede prescindir, como las luces de bengala, silbatos y otros productos innecesarios para estas celebraciones.
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De diciembre comenzó la celebración de estas reuniones, en recuerdo del camino que siguieron María y José, hasta el pesebre
