Aguascalientes carece de una efectiva promoción de la salud mental, pues las políticas públicas están encaminadas más a la intervención que a la prevención de los problemas de sus habitantes.
Aunque la Ley General de Salud federal y la propia del estado de Aguascalientes establecen como prioridad la prevención y la promoción de la salud sobre la curación, “en nuestro contexto es al revés: el sistema de salud está orientado a intervenir y curar, más que a promover el bienestar físico y mucho menos mental”, señala el médico e investigador Martín Veloz Juárez.
El especialista afirma que los mexicanos dan poca importancia a la estabilidad emocional y mental, pues es común que se acuda con los psicólogos o psiquiatras cuando tienen problemas muy graves, como ideas suicidas, violencia, ruptura de los lazos familiares.
“En la actualidad tenemos indicadores como el divorcio, que no son el problema por sí mismos, sino que es producto de las malas relaciones de pareja que se están dando entre la población, y que en muchos casos se maneja mal e impacta en los hijos y la pareja. Por eso es que debemos fomentar las prácticas positivas de salud mental, que evitarán en un futuro estos problemas”, dijo.
Añade que eso será posible si el sistema de salud enseña a la población a fortalecer sus habilidades personales y sus redes sociales de apoyo, y le ayuda a valorarse como persona mediante la reflexión y la redefinición de su proyecto de vida, sin dejar de lado la reorientación de sus estilos de vivir, de alimentarse, de descansar y de relacionarse con sus familias y su pareja.
Dijo que se organiza un Congreso Internacional de Salud Mental, cuya sede está por definirse, donde se darán a conocer algunas propuestas para efectuar trabajos, programas y acciones de prevención y promoción de estilos saludables de vida enfocados a la estabilidad mental, que podrían ser implementadas incluso en todo el país, sobre todo ante la crisis económica mundial, por la cual la Organización Mundial de la Salud prevé un probable aumento de suicidios y trastornos psíquicos.
“Vamos a hacer énfasis en la promoción de indicadores positivos de salud mental que tienen que ver con el mejoramiento de la autoestima, el proyecto de vida, las habilidades sociales, el manejo adecuado de conflictos, el dormir y descansar con calidad, manejo del estrés, el sexo saludable, responsable y placentero, y el trabajo productivo, entre otros”, dijo.
La salud mental es un fenómeno complejo determinado por múltiples factores sociales, ambientales, biológicos y psicológicos, e incluye padecimientos como la depresión, la ansiedad, la epilepsia, las demencias, la esquizofrenia, y los trastornos del desarrollo en la infancia, algunos de los cuales se han agravado en los últimos tiempos. En este sentido, lograr que la población conserve la salud mental, además de la salud física, depende, en gran parte, de la realización exitosa de acciones de salud pública, para prevenir, tratar y rehabilitar.
El DATO:
Los mexicanos dan poca importancia a la estabilidad emocional y mental, pues es común que se acuda con los psicólogos o psiquiatras cuando tienen problemas muy graves