El Obispo de la Diócesis de Aguascalientes Juan Espinoza Jiménez, al servicio de la iglesia universal “Uno viene renovado con deseos de seguir impulsando el trabajo que el papa quiere que impulsemos, una iglesia más misionera, atenta a todos, sinodal, que vaya al encuentro de aquello que están más alejados y hoy es lo que hemos escuchado en el evangelio”, lo leyó el padre Víctor y le pidió que no equivocara, por la belleza del mismo, de Corpus Christi, que habla de la vocación de San Mateo un cobrador de impuestos.
Sacó tres palabras del mismo, se trata de un encuentro, una fiesta y un escándalo, que hay una pintura muy bonita en una iglesia que se llama San Luis de los franceses, para hacer referencia del encuentro, donde Mateo está sentado en su mesa, con una mirada muy oscura hacia Jesús y una muy clara hacia el dinero, donde Jesús le dice “ven y sígueme”, pues hay un encuentro no solo físico, sino espiritual, a sabiendas que era un pecador.
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Ellos, judíos usados por los romanos para rendir culto a través de los impuestos, eran considerados rateros porque cobraban más y adoraban un dinero con monedas blasfemas y la imagen del Cesar, los cobradores eran entonces, seres pecadores públicos y las personas, se quedaban críticos y atónitos, pues cómo era posible que el hijo de Dios se juntara, buscara a los perdidos, para seguir un camino justo y recto.
Por otro lado, el segundo es una fiesta, una del corazón, una celebración, el encuentro con Jesús, es eso, una fiesta, una alegría, según describe el Obispo, así como también la comida con los pecadores, donde hace las charlas de conversión.
El tercero es un escándalo porque estaban los Fariseos y Escribas que nada más estaban viendo en que se equivocaba Jesús para decirle y señalar lo malo que hacía y le recriminaban incluso las charlas que tenía con los pecadores, siendo que ninguno de ellos lo haría pues los judíos creían que platicar con una persona pecadora los manchaba y dejaba impuros, no podían ni ver ni tocar a nadie.
Diciéndole que era un blasfemo, siendo que Jesús tiene su corazón puro, y así se expande, detalló que al ir a misa, se hace este encuentro con Jesús “nosotros no somos tan santos, pero no traemos cosas como las de Mateo, pero Jesús no nos juzga, si vienes preocupado el te aligera, si vienes con muchos problemas él te ayuda a cargarlos, viene contigo y entra a tu corazón cuando lo comulgas”, sin embargo habló de que también en la iglesia hay Escribas y Fariseos que sólo critican a los mismos participes de la misa.
Ojalá que nosotros no nos escandalicemos, la verdadera religión, la enseñanza más bonita del evangelio es que Jesús no se fija en cosas ritualistas, quiere que todos se salven y que la religión, la oración, eucaristía, nuestros rezos nos lleven al encuentro del hermanosObispo de la Diócesis de Aguascalientes Juan Espinoza Jiménez
"De lo demás cada vez que nosotros hacemos algo bueno por un hermano, sea lo que sea, eso es como una oración, ayudar, estar cerca de las personas, sobre todo de los alejados y pecadores, acercarnos es oración y alabanza a Dios”
La verdadera religión hace acercarse a Dios, pero también a los demás, a ser caritativos, así que espera que este evangelio deje una marca en los fieles, para que se puedan encontrar con él y luego salir, para no juzgar a aquellos que no están en el mismo camino, sin juzgar y sin criticar a la familia, tratando con cariño, con amor, porque así queda claro que lo que se escucha en misa, se vive.
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