Medio centenar de sacerdotes serán movidos de parroquia, en el transcurso de las próximas semanas, por instrucción directa del obispo de la Diócesis, José María de la Torre Martín.
La primera tanda de reasignaciones comenzó el pasado 12 de junio y concluirá el 5 de agosto, con la llegada de nuevos pastores a las parroquias del Sagrado Corazón de Jesús, Santa María Madre y Reina de los Mártires, Nuestra Señora del Carmen, Santa Teresa de Ávila y Santo Toribio Romo, en la capital del estado.
De igual forma, se anunciaron movimientos en las parroquias de Nuestra Señora de Guadalupe, en la comunidad de Matancillas, del Sagrado Corazón en Matanzas y Nuestra Señora de Guadalupe, en San Francisco de Los Romo.
A través de un comunicado emitido por el padre Daniel Escobedo Torres, secretario canciller del Obispado, se puntualiza que dichos cambios son necesarios y convenientes para las comunidades y personas.
Sobre el particular, Felipe Gutiérrez Rosales reconoce descontento entre algunos feligreses por estos cambios, sin embargo, debe verse más allá de los afectos o afinidades que se tengan con ciertos sacerdotes.
Debemos tomarlo con calma. A veces sí se encariñan con el sacerdote de la comunidad, pero creo que hay que verlo también con el sentido eclesial, de la apertura y de la riqueza que ofrece cada etapa de la vida. Hay sacerdotes buenos, donde todos aceptan sus cambios.Felipe Gutiérrez Rosales
Tras los primeros nueve movimientos, señala, se hará una pausa debido a la celebración del Quincenario en honor de la Virgen de la Asunción, hasta completar un total de 50, que generalmente se registran cada año, desde 2017.
9 oficiantes han sido ya enviados a parroquias distintas a las que venían sirviendo