La fiesta de la Pascua debe darnos fortaleza para levantarnos victoriosos de nuestras derrotas, para hacer a un lado de una vez por todas el pecado y la muerte en vida que conlleva, para levantar la mirada al cielo y dejar de dirigirla sólo al suelo.
Al dirigir un mensaje en la Catedral de Aguascalientes, con motivo de la celebración del Domingo de Resurrección, el canónigo Roberto Torres Valenciano, hizo un llamado a los presentes a, de una vez por todas, decidirse a hacer a un lado de su vida la piedra del mal comportamiento.
Es necesario que nos dejemos guiar por la luz verdadera, por encima de orgullo y del placer. Digámosle a las vanidades mundanas que no vivimos para ellas, sino para el Señor de la vida,
dijo, haciéndose eco del mensaje que ofreciera el papa Francisco al dar inicio la Pascua.
Durante su homilía, Torres Valenciano hizo un llamado a los presentes a no convertirnos en personas cínicas y burlonas, portadoras de un nocivo desaliento y que crean que la muerte es más fuerte que la vida.
No busquen al Señor donde nunca lo encontrarán, porque no es Dios de muertos, sino de vivos. Cuántas veces preferimos permanecer encogidos en nuestros límites, encerrados en nuestros miedos. Debemos alzarnos y levantarnos de nuevo, a mirar hacia arriba y creer que estamos hechos para el Cielo, no para la tierra, para las alturas de la vida, no para las bajezas de la muerte.Roberto Torres Valenciano
Afirmó por último que no debemos dejarnos llevar por la corriente o por el mal de los problemas y no tropezarnos más con las piedras del pecado y los escollos del miedo y la desconfianza.