De manera completamente inesperada, cerca de la medianoche falleció el vocero de la Diócesis de Aguascalientes, Carlos Alberto Alvarado Quezada.
El presbítero fue sorprendido por la muerte en la cochera de su casa. Se presume que al sentirse mal intentó salir por ayuda sin lograrlo. Fue encontrado por feligreses que acudieron a buscarlo, luego de que no se presentó a presidir la misa de las 08:00 hrs. en el templo de Nuestro Señor de la Misericordia del fraccionamiento Morelos, al sur de la ciudad, donde ejercía su ministerio eclesial.
Personal del Obispado de Aguascalientes mostró sorpresa y pesar por el repentino fallecimiento, toda vez que el sacerdote no mostraba síntoma de enfermedad alguna y apenas el pasado lunes encabezó la conferencia de prensa que semanalmente ofrece la Diócesis.Alvarado Quezada tenía a su cargo la edición del Correo Diocesano, contaba con 51 años de edad y contaba con estudios de periodismo.
Era originario de Aguascalientes. Nació el 27 de septiembre de 1967 y vivió su niñez en la colonia San Marcos, de esta ciudad.
Fue ordenado sacerdote el 17 de mayo de 1998 por el entonces obispo Rafael Muñoz Núñez y durante muchos años se desempeñó en la parroquia de Nuestro Señor del Encino, enclavada en el tradicional barrio del mismo nombre.
Sus restos serán velados en el templo donde estaba asignado, mismo sitio donde mañana se realizará una misa de cuerpo presente.