El chofer de la pipa de gasolina que se estrelló, la mañana de este lunes, en contra de un tren carguero y provocó la muerte de dos maquinistas, así como cuantiosos daños materiales, será acusado formalmente por la empresa ferroviaria para que responda por los hechos.
José Ángel Muñoz Hernández, integrante de la dirigencia nacional del Sindicato de Trabajadores Ferrocarrileros de la República Mexicana (STFRM), dio a conocer que la totalidad de los tripulantes del convoy eran originarios de Aguascalientes y regresaban de la ciudad de Irapuato, Guanajuato.
Uno de los trenistas fallecidos tenía por nombre Jorge Luis y se había caracterizado por presidir un club de propietarios de Motocicletas Harley, que semana a semana se reúnen en la explanada del edificio de la Sección 2 del STFRM en Aguascalientes. El otro conductor de la mole de acero se llamaba Guadalupe.
Asimismo, una persona que realizaba sus prácticas de maquinista, de nombre Marco Nathanael y el garrotero Gerardo, quedaron encamados en el Hospital General de Zona número 1 del Instituto Mexicano del Seguro Social, donde los reportan graves.
Tanto Marco Nathanael como Gerardo evitaron quedar atrapados entre las llamas porque se percataron a tiempo de los hechos y saltaron de la unidad en movimiento.
De acuerdo a los protocolos que se tienen establecidos para estos casos, la empresa correrá con los gastos funerarios de los maquinistas que perdieron la vida y al mismo tiempo, iniciará un proceso penal en contra del conductor de la pipa, quien es a todas luces el responsable de la tragedia.
Muñoz Hernández explicó que, dados los hechos, el chofer de la cisterna podría ser acusado de homicidio imprudencial, así como obligado a responder por los millonarios daños que ocasionó su imprudencia.
