En los momentos de la homilía, el Obispo de la Diócesis de Aguascalientes, este domingo, realizó profundas preguntas, “tenemos que ser muy críticos para distinguir qué laico, que religioso, que religiosa, que obispo, que maestro, qué empresario nos habla con verdad o con mentira, con luz o con oscuridad, con verdad o con engaño, con cizaña, que son confusos y hay quienes llaman profetas a falsos predicadores de la palabra”.
Detalló que todo esto es parte de la coexistencia, la semilla del bien y del mal la tienen todos en el corazón, ¿Cuál es el que dejas tú que crezca?, indagó en los asistentes.
➡️ Suscripción mensual a un super precio ¡Lee el periódico desde tu celular!
En los pequeños llamados de Dios se van realizando sus obras y deseos a través de los humanos. Expuso las dudas sobre por qué las personas malas permanecen en la sociedad, por qué no mueren y entre los ambientes la gente malvada, permanecen, los violentos, los pecadores y los buenos se van como los abuelitos, se lleva Dios a las mejores personas, el mejor maestro, al mejor papá, al mejor sacerdote. “el corazón de Dios es muy grande como el corazón de una madre, y espera pacientemente la conversión del pecador, él no quiere que nadie se condene, que todos lleguen a la verdad y por eso nos sostiene a algunos, a ver si cambiamos, no nos arranca de inmediato”, declaró.
En la Misa Dominical de la Catedral Basílica, el líder de la iglesia en Aguascalientes, proclamó lo importante que es tener la confianza con Dios y no desviar el pensamiento de bondad y servicio, no permitirse ser personas desprevenidas, distraídas para no llamar profetas a aquellos falsos predicadores de lo mundano, invitó a tener al espíritu santo en el corazón.
_____________________________________
Síguenos en Facebook: El Sol del Centro
Twitter: @ElSoldelCentro_
Escucha el Podcast ⬇️