La industria nacional pierde al año cantidades millonarias por los efectos perniciosos de la piratería, mientras el fisco deja de captar unos cinco mil 200 millones de pesos, pues por lo menos seis de cada 10 personas compran productos piratas, informó ayer el analista comercial Alejandro Esparza Martínez, con base en un estudio recientemente realizado.
En Aguascalientes se estima que existe un consumo promedio anual de productos piratas por la suma de 300 millones de pesos, “quizá un poco menos, pero es un estimado, porque es muy difícil cuantificar este tipo de compra-venta”.
Destacó que sectores de la población con mejores ingresos compran más imitaciones de productos de lujo y electrónicos, por lo que el fenómeno ya no es exclusivo de la población más pobre.
Enseguida detalló que la población encuestada sigue comprando piratería porque no la considera un delito sino una transacción normal, y tampoco mide los daños que ocasiona al empleo y la economía.
Esparza Martínez señaló que es urgente que el gobierno intensifique las acciones de combate a este delito para mitigar las pérdidas económicas del sector privado y de sus propias finanzas, y para dar certidumbre jurídica a las empresas.
Luego explicó que para el estudio sobre el comportamiento del consumidor se eligieron residentes de los medios urbano y rural.
Precisó que los daños económicos que ocasiona la piratería son millonarios, ya que sólo en las tres ciudades evaluadas la industria pierde al año 2 mil 476 millones 577 mil 552 pesos en giros como los textiles, discos, videos, música, medicinas y software, entre otros, mientras el fisco deja de recaudar más de mil 200 millones de pesos al año.
El mayor consumo de piratería se da en la Ciudad de México, donde las pérdidas para la industria se ubican en dos mil 170 millones de pesos; seguida de Guadalajara con 671 millones 491 mil, y Monterrey con 544 mil 603 pesos. Aguascalientes se ubica en la tabla media alta, con un consumo promedio anual de 300 millones de pesos.
La encuesta señala que los mayores compradores de piratería son jóvenes de entre 16 y 24 años, que representan un riesgo para la industria y la economía si mantienen esos hábitos cuando sean trabajadores y tengan mayores ingresos.
Aunque cuantificar los daños económicos que la “piratería” causa a la sociedad, a las víctimas y al Estado en general es incalculable. En el mismo contexto, indicó que las pérdidas en todo el mundo bien pueden superar los 450 mil millones de dólares anuales.
Expresó que muchos no han adquirido conciencia de que el plagio de productos es un delito que está afectando a la sociedad misma. Además, explicó que los “piratas” al estar respaldados por “grandes intereses económicos” evaden las acciones de la justicia.
Señaló que no hay cifras económicas precisas, pero en una proyección del problema se tiene que tener en cuenta que todo producto “pirata” que está en la calle desplaza a un producto auténtico y cada vez que no se vende es una pérdida.
Una pérdida, subrayó finalmente, para el distribuidor autorizado que sigue las reglas de la Constitución y la ley, y al final puede decidir no ejercer más el comercio y con esto despide personas, deja de pagar alquiler, deja de pagar prestaciones e impuestos y otras contribuciones.
LA CIFRA:
Seis de cada 10 personas compran artículos piratas