Habitantes del municipio de Calvillo, especialmente en la comunidad de La Panadera, situada 48 kilómetros al poniente de esta capital exigen una investigación a fondo y se proceda en contra del personal del Hospital General de ese municipio, dependiente del Instituto de Servicios de Salud del estado (ISSEA), luego que negaran la atención a una jovencita de apenas 20 años de edad, a la que no se brindó la atención necesaria por no contar con 350 pesos para la consulta médica y cinco mil como depósito para internarla.
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De acuerdo a lo que han manifestado los familiares de quien en vida llevó el nombre de Jaqueline, la muchacha, quien tenía toda la vida por delante y cursaba sus estudios de preparatoria en el telebachillerato de la mencionada comunidad, era víctima desde hace tiempo de insuficiencia renal crónica, situación que le obligaba a recibir hemodiálisis de manera regular para poder mantenerse con vida.
Fue la tarde del pasado martes cuando, debido al envenenamiento de su sangre por la falta de la natural filtración que proporcionan los riñones, se comenzó a sentir mal, a tal grado que solicitó a su madre la auxiliara para recibir atención médica, optando por trasladarse al Hospital General de Calvillo, en la cabecera de este municipio.
Al llegar a este sitio, lejos de recibir la urgente atención requerida, el encargado de las cajas le advirtió de manera tajante que, por ser estudiante tenía derecho a ser atendida en el IMSS, ante lo cual, si deseaba ser recibida en el sitio, debía cubrir la cantidad de cinco mil pesos como depósito por los gastos que se generasen, además de 350 pesos para el pago de la consulta.
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Debido a que no contaban con tal recurso, optaron por retirarse con un médico privado, quien exigió al personal del nosocomio admitiera a la joven, quien para esos momentos se encontraba cada vez en peor estado y quien tuvo que trasladarse en un taxi y entrar caminando al área de urgencias, pese a lo cual por segunda ocasión les fue negado el servicio. Una tercera negativa vino cuando, desesperados, solicitaron ayuda a través del 911, donde solo les dijeron que indicarían al hospital que la atención era urgente, situación que nunca ocurrió.
A la joven, ya para entonces moribunda no le quedó otro remedio que retirarse a su casa, donde en horas de la madrugada empeoró y tuvo que ser llevada en ambulancia al mismo Hospital General de Calvillo, donde ahora sí fue admitida, pero ya nada se pudo hacer por ella y falleció a los pocos minutos.
Este caso ha causado tal enojo entre los habitantes de esa zona del estado, que se han programado diferentes manifestaciones frente al hospital, con objeto de solicitar la destitución de los presuntos responsables de la muerte de Jaqueline, así como se inicie un proceso penal ante su proceder.
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Ocasiones le fue negada la atención a la joven
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