Hace más de dos décadas, en el Infonavit Morelos nació Chuy, conocido en la entidad como el chico de la patineta y señalado por sólo contar con su torso y extremidades superiores; ahora, ese joven al que no le auguraban más de un año de vida, cuenta con 22 años y destaca por desafiar las complicaciones a las que se ha enfrentado a lo largo de su existencia.
Nací con una malformación, que consiste en que tus piernas están deformadas, a los siete años me las cortaron para formarme una columna con mis mismos huesos, antes estaba acostado y ahora puedo caminar con las manos
Asimismo, señaló que los médicos: “no me daban ni un año de vida, le decían a mi familia que no le hiciera la lucha, que me dejaran en una cama, no me daban ni un año y ahora ya tengo 22”; fue a los cinco años que decidió comenzar a moverse sin ayuda, aprendió a gatear, luego a impulsarse con los brazos y finalmente tomó a su fiel acompañante, una patineta, que se ha convertido en su medio de transporte desde los siete años.
Sobre limitaciones, retos y desafíos a los que se ha enfrentado, Chuy lamentó que la ciudad no está acondicionada para andar en silla de ruedas, ya que son notorios los espacios en los que incluso se carece de banquetas, asimismo, destacó que ha tenido que afrontar comentarios de la gente, “la gente se te queda viendo, ya no me perjudica, primero si me sentía mal pero ahora no, en secundaria me ahorcaron, batallé el primer año y segundo, con el paso del tiempo afronté los comentarios de la gente, escucho y no me afecta”.
Por otro lado, en cuanto a la inclusión en la sociedad, mencionó que no sólo es un trabajo de las autoridades, ya que la misma ciudadanía carece de empatía.
Hay gente que se estaciona en las rampas, no dan chance de que una persona con discapacidad pueda transitar, nos tenemos que enseñar a subir banquetas
Chuy sin límites, Aguascalientes
Sobre sus fuentes de ingreso, cabe señalar que Chuy se desempeña en la oficina de atención de la secretaría particular del municipio capitalino, y además de ofrecer dulces en la plaza y cruceros, a cambio de una moneda, desde los 19 años es conferencista certificado, “empresas me han buscado para motivar a sus trabajadores, he ido a León, Tamaulipas, Zacatecas, Michoacán, México, el objetivo de las ponencias es demostrarle a las personas que no hay límites, se trata de hacer reflexionar a la gente, que hay más salidas”.
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Cabe señalar que Chuy reparte despensas a gente necesitada de distintos puntos de la ciudad, es por eso que llama a la sociedad a que al momento de que cuenten con ropa, alimentos, entre otras donaciones, lo contacten a través de sus redes sociales para llevarlas a quienes requieran.
Finalmente, el conocido en sus redes sociales como “Chuy sin límites”, externó que prepara un libro de su autoría, el cual espera publicar el próximo año y en el que compartirá palabras de aliento; “mi mayor motivación es mi familia, mi hijo, mi chica, mis hermanas y mamá, mi papá me dejó antes de que cumpliera el año, tengo contacto con él, no le reprocho ni le guardo rencor, la vida se encarga de todo, da muchas vueltas, a veces estamos arriba y a veces abajo”, concluyó.
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