De manera muy sentida, el obispo José María de la Torre Martín oró, durante la Misa Pontifical con motivo de la fiesta patronal de Nuestra Señora de la Asunción, por todos los enfermos que han sido afectados o perdieron la vida a causa del Covid-19.
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Desde el altar central de la Catedral Basílica y ante la imagen de la patrona de Aguascalientes, el pastor de la Diócesis pidió su intercesión por los médicos, enfermeras y personal de la salud que brinda a la población atenciones preventivas y curativas a quienes han debido ser internado en los hospitales de la entidad.
Una plegaria especial merecieron todas las familias aguascalentenses, que se han visto obligadas a hacer exequias precipitadas y dolorosas a los consanguíneos que han perdido la vida por esta causa y de quienes no han podido despedirse como es debido.
Pedimos también por las autoridades, para que tomen las decisiones pertinentes para que salgamos de esta pandemia y las secuelas laborales, sociales, educativas, de todo ámbito (…) que el señor les brinde tino a las autoridades y nos ayude a todos a superar juntos esta grande dificultad, que nos exige responsabilidad generosidad y solidaridad
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A la Misa Pontifical acudió una gran parte de los integrantes del presbiterio de la Diócesis, quienes ante la restricción para que imagen de la Virgen de la Asunción recorriera en Romería las calles de Aguascalientes, como había sucedido hasta hace 65 años de, realizaron una pequeña procesión a través de la nave central y el atrio de la Catedral.
En este marco, el obispo José María de la Torre Martín reconoció que a causa de la pandemia que azota al mundo entero, el año pastoral denominado como de La Fraternidad, se ha podido vivir con iniciativas personales y comunitarias que han permitido poner en marcha y obra lo reflexionado a la luz del Evangelio y asumiendo el compromiso social de nuestra fe, pero sin poder vivir conforme a lo planeado las orientaciones pastorales del este año.
Hoy la Providencia nos abre la posibilidad de concretizar, con un espíritu renovado un nuevo año pastoral que llevará por nombre ‘Año del Discernimiento Fraterno 2020-2021
obispo José María de la Torre Martín
En este marco, recordó a los sacerdotes que la capacidad de discernir no se improvisa, sino que se prepara adecuadamente cuando se cultiva con la vigilancia continua, la reflexión y el análisis de la realidad, ante lo cual este año pastoral será una oportunidad para practicar un examen de conciencia pastoral, basado en la vivencia de la fraternidad como manifestación del mandamiento supremo del amor.
Que el señor les brinde tino a las autoridades y nos ayude a todos a superar juntos esta grande dificultad”
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