Los cuerpos de las 12 tumbas afectadas por la inundación que dejó la tromba que azotó a la ciudad hace algunos días, obligó a cambiar los ataúdes, pero no se llevó a cabo ninguna exhumación, ni se invadieron fosas ya adquiridas.
Así lo explicó el gerente del cementerio Jardines Eternos 2000, quien prefirió no proporcionar su nombre, pero aclaró que ningún cuerpo se salió de los ataúdes, ni tampoco los cuerpos andaban flotando.
Explicó que el área inundada se encuentra cercana al cauce del río San Pedro, pero aún sin ser ocupada,
está en proceso de venta
Sin embargo, indicó que tumbas cercanas a esta área sí sufrieron un reblandecimiento de tierra,
en total fueron 12 tumbas y por cuestiones de seguridad se realizó el traslado de los ataúdes a un sitio más alto y más seguro dentro del propio panteón
Señaló que ya se habló con los familiares,
se les explicó la situación, se les indicó el sitio en el que fueron reubicados los cuerpos, pero nosotros como empresa asumimos la responsabilidad, son costos que el panteón tiene que absorber, ante esto que fue un desastre natural
La propiedad
de la fosa sigue intacta y sólo se cambió de lugar, pero sin afectar los intereses de nadie
Las paredes de
esas 12 tumbas se ablandaron y para evitar algún problema mayor fue que se decidió llevar a cabo el traslado, el cual se llevó a cabo de manera ordenada y sin que se presentará ninguna confusión, nos hubiera preocupado que se hubiera inundado todo el panteón tal y como ha ocurrido en otros cementerios, sobre todo en entidades del sureste del país
Indicó que
dentro de la estrategia de cualquier panteón, públicos o privados, hay zonas específicas que se dejan en reserva y en este caso está fue el área empleada.
Gerente del cementerio Jardines Eternos 2000
Derechos:
Las fosas afectadas no estaban ocupadas, pero corrían riesgo tumbas cercanas a la inundación