Con pistola en mano y la amenaza de matar a la empleada de un expendio de pan, solitario ladrón consiguió de manera impune apoderarse de un botín de alrededor de diez mil pesos en efectivo, con los cuales se dio a la fuga sin que hasta el momento haya podido ser localizado.
Los hechos se registraron alrededor de las 21:30 horas de este lunes en la negociación, ubicada en el fraccionamiento Haciendas de Aguascalientes, donde ya a punto de cerrar, un malencarado sujeto se introdujo a toda prisa, y encañonó a la empleada del lugar, al tiempo que, en medio de gritos, amenazas y maldiciones, le ordenó se encerrara en el baño del lugar, bajo la advertencia que si se le ocurría salir, le dispararía hasta dejarla sin vida.
Temerosa de que el delincuente cumpliera su dicho y sin la oportunidad de gritar por ayuda, debido a que una taquería, una paletería y varios negocios aledaños se encontraban cerrados, al ser el día escogido para su descanso, la trabajadora optó por obedecer al pie de la letra las indicaciones del maleante, rogando para que no le hicieran daño.
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Fue en ese momento que el facineroso aprovechó para brincar el mostrador y comenzar a esculcar en la caja registradora, de donde extrajo aproximadamente diez mil pesos en efectivo, producto de la venta del día.
Al ver que no había nada más que pudiera llevarse, el sujeto emprendió la huida a toda prisa y con rumbo desconocido. Se presume que actuó de manera solitaria, toda vez que no se escuchó el motor de alguna unidad donde un cómplice lo estuviese esperando.
Transcurridos valiosos minutos, que el ratero aprovechó para poner tierra de por medio, la empleada tomó valor y por fin salió de su encierro. Al ver que ya no había nadie en el lugar, se encargó de dar aviso a las autoridades, con objeto que emprendieran la búsqueda del malviviente.
A los pocos minutos llegaron policías municipales, estatales e incluso ministeriales, quienes se dieron a la tarea de establecer un barrido de la zona para tratar de dar con el ladrón, sin embargo, su esfuerzo fue infructuoso.
Hace tres semanas, el propietario de este mismo local fue también víctima del robo de una camioneta pick-up que utilizaba para el traslado de mercancía.
BOTÍN
Mientras la empleada permanecía en el baño, bajo amenaza, el ratero se apoderó de la venta del día.