Isaías y Gerardo fueron sentenciados culpables de los delitos de robo calificado y homicidio doloso calificado con premeditación, alevosía y ventaja en agravio de la víctima identificada como José Rosario, por lo que el primero deberá pasar 46 años y seis meses en prisión, mientras que Gerardo fue condenado a 38 años de cárcel.
El día 18 de abril del año 2009, la víctima recogió $42 mil 632 pesos de las ventas de la de la gasolinera denominada “La Encantada”, ubicada en la carretera interestatal que conduce a “Las Palomas”, en el municipio Pabellón de Arteaga; al dirigirse a su casa a bordo de un vehículo Chevy tipo Van, fue interceptado por Isaías quien viajaba en una camioneta Dodge Ram, en color blanco, con la cual cerró el paso a la José Rosario quien detuvo la marcha, poco después llegó Gerardo con otros cómplices a bordo de una camioneta tipo Cherokee, en color tinto. Posteriormente Gerardo amagó al afectado con un bate de béisbol con el cual golpeó el parabrisas de la Van donde viajaba el ahora fallecido.
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Lo sometieron con cinchos de plástico en pies y manos por detrás de la espalda, amenazandolo en todo momento con armas de fuego cortas.
Lo llevaron a un despoblado ubicado en el camino viejo al Chiquihuite, donde lo despojaron del dinero que llevaba oculto en el vehículo, para después los responsables dejarlo abandonado y dirigirse a tomar una cerveza en otro sitio.
Más tarde Isaías, recibió una llamada y regresó a donde habían dejado a la víctima, ya que el ahora fallecido logró identificar a Isaías, debido a que era comandante de la Policía Municipal, ante tal situación el ahora inculpado ordenó que José Rosario fuera asesinado para evitar ser reconocido, momento en el que uno de los cómplices le descerrajó dos disparos en la cabeza con una pistola escuadra.
Es por esto que además de la sentencia, los homicidas deberán pagar $42 mil 506 pesos por la reparación del daño ante el delito de robo calificado, y por el homicidio doloso calificado con premeditación, alevosía y ventaja, deberán resarcir $333 mil 712 pesos, además de la indemnización por daño moral, con un millón 136 pesos.
ASESINATO
El ahora fallecido logró identificar a Isaías, ya que era comandante de la Policía Municipal de Pabellón de Arteaga, por lo que éste último ordenó que lo mataran.