Impresionante movilización se registró la mañana de este viernes en los alrededores del Cereso para varones y los juzgados de oralidad locales y federales, cuando elementos de la Policía Ministerial de Aguascalientes fueron incapaces de cumplimentar una orden de reaprehensión en contra de escurridizo sujeto al que le imputa la comisión de delitos contra la salud, en su modalidad de venta de enervantes.
Los hechos se registraron la mañana de ayer en la zona conocida como Granjas Cariñán, donde los policías investigadores localizaron al presunto delincuente, a quien identificaron como Iván Arturo, contra quien pesa una orden de reaprehensión por los motivos anteriormente señalados.
El sujeto se trasladaba a bordo de un auto Chevrolet modelo Astra en color gris cuando fue alcanzado por los integrantes del grupo Órdenes de Aprehensión, quienes le marcaron el alto en un hecho que parecía de mera rutina.
Lo que no esperaban fue que, sabiendo lo que le esperaba si se detenía, Iván Arturo lejos de disminuir la velocidad, pisó el acelerador a fondo para tratar de huir, intentó en el cual estuvo a punto de atropellar a uno de los policías.
Para evitar que se alejara y a la vez proteger su integridad, el elemento desenfundó su pistola de cargo y disparó a los neumáticos del Chevrolet Astra, logrando hacer impacto y desinflarlos.
Esta acción permitió que el automóvil no pudiera continuar su camino, sin embargo en este punto el delincuente fue más hábil que sus captores y, aprovechando que éstos tardaron en reponerse de la sorpresa, bajó a toda prisa de la unidad y se internó en un sembradío aledaño, perdiéndose entre las milpas.
Al no poder localizarlo, se solicitó el auxilio de corporaciones policiacas, quienes, por tierra y aire peinaron la zona, sin lograr dar con el paradero de Iván Arturo, a quien pareciera que se lo tragó la tierra.
La impresionante movilización llamó la atención tanto de los habitantes del lugar y quienes tienen su sitio de trabajo en esa zona, como del resto de la ciudadanía, quienes comenzaron a tejer diferentes historias que al final resultaron poco exactas.
Hasta el cierre de esta edición, el envenenador no había podido ser capturado ni localizado.
OPERATIVO
Policías a pie, en patrulla y helicóptero buscaron infructuosamente al envenenador