Autoridades y ciudadanos debemos ver a nuestros semejantes como seres humanos, más allá de fronteras, condición social o simpatías políticas, especialmente si se trata de gente enferma a la cual hay que tenderle la mano.
En conferencia de prensa, el vocero de la Diócesis de Aguascalientes, Felipe Gutiérrez Rosales, lamenta que, en el México de hoy sea común un lenguaje separatista, que ahonda las diferencias entre semejantes.
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“Debemos darnos cuenta de las consecuencias de nuestros actos. Creo que a final de cuentas nuestra gran tarea es vernos como personas, más allá de los estigmas sociales, económicos, políticos, y de otro tipo que podamos tener, la invitación es a vernos como personas, más allá de estereotipos”, considera.
Al referirse a las expresiones del gobernador Martín Orozco Sandoval, quien la semana pasada advirtió, con fuerte vocabulario, que aquí no se atenderían enfermos procedentes de otras entidades, el vocero de la Iglesia católica en la Diócesis, reconoce que hasta cierto punto es entendible la postura de no contar con el presupuesto suficiente.
Más allá de ese razonamiento, creo que la apertura es con todos los hombres y tienen que atenderse las necesidades de todos. Tenemos que tener apertura más allá de los límites del estado y tener el cuidado debido y recordar que todos somos personas, más allá de los límites
En otro orden, aplaudió la determinación de legisladores federales por eliminar la prescripción en el delito de pederastia, con objeto que, quienes hayan sido víctimas de este delito y callen durante años, tengan la oportunidad de presentar una denuncia en contra de sus presuntos agresores.
Al interior de la Iglesia católica, recuerda, se ha establecido la política de cero tolerancia hacia este tipo de agresiones, para cuyos responsables se piden sanciones severas, e inclusive se coadyuva con las autoridades para facilitar los procesos penales.
En este sentido, pidió a quienes tienen las riendas de los gobiernos en todos los niveles, así como a los encargados de la procuración e impartición de justicia, que esa misma cero tolerancia se aplique en la comisión de otros delitos, donde parecen no existe la misma severidad para perseguir o juzgar.
Tenemos que tener apertura más allá de los límites del estado y tener el cuidado debido y recordar que todos somos personas, más allá de los límites
Felipe Gutiérrez Rosales, vocero de la Diócesis de Aguascalientes