La pandemia llego a nuestro país en el maro de una precaria situación económica y con Pemex en una complicada competencia internacional, mientras el Gobierno de la República impulsa proyectos costosos y poco adecuados.
Así lo manifestó Ernesto Cordero Arroyo, quien bajo los colores de Acción Nacional ocupó importantes puestos públicos, entre ellos la titularidad de la Secretaría de Hacienda, experto en economía y quien ofreció una conferencia en línea a través de la página electrónica de la Universidad Tecnológica El Retoño.
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A través de su exposición, denominada “Reactivación económica después de la pandemia”, el ex panista recordó que la última etapa donde se presentó un periodo recesivo fue en la crisis de 2008-2009, “un problema global provocado por las hipotecas inmobiliarias, durante la cual México registró una caída de 2.9 en el Producto Interno Bruto (PIB)”.
Posteriormente, “soportamos una crisis más, provocada en esa ocasión por la Influenza H1N1, y después de eso, México fue capaz de recuperarse y se logró un buen crecimiento, pero después esta tendencia comenzó a decaer, pero con una tasa de crecimiento más o menos estable, sin embargo, a partir de 2009 el crecimiento fue negativo y en 2019-2020 las cosas ya no estaban bien y en este contexto la pandemia llegó a rematar”.
Ahora tenemos una caída en la economía del 14.1, en comparación al PIB del segundo semestre del año pasado y lo que nos espera es una recesión económica profunda y eso no puede ser atribuible solamente a la pandemia, sino que ya veníamos con problemas antes de esto
En este sentido una de las piedras angulares en esta crisis es Pemex, empresa que, si bien dejó de ser la palanca de crecimiento en el país, sigue siendo un referente muy representativo y por tanto muy atada a la calidad crediticia del país.
Entonces, “esta pandemia nos encontró en una situación muy delicada y con Pemex a punto de la insolvencia económica, luego de que en 2019 perdiera 346 mil millones de pesos y al primer trimestre de este año fueron 562 mil 300 millones de pesos, entonces esta empresa no está bien bajo ninguna circunstancia y sigue empeorando”.
Por lo pronto indicó que para el Covid-19 no hay vacuna ni curación, pero además es necesario salvar el falso dilema de “o salvamos vidas o ingresos, porque se pueden alcanzar los dos objetivos, con la creatividad y audacia suficiente se pueden preservar las fuentes de empleo y la salud de la población y para ello el Gobierno debe aumentar su gasto inteligentemente”.
PRONÓSTICO
Pasada la pandemia le espera al país una recesión económica profunda por malas decisiones políticas
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